Cerro Catedral, en Bariloche

Uno de los centros de esquí más tradicionales de la Patagonia se encuentra, además, en un lugar emblemático: el Parque Nacional Nahuel Huapi. A tan sólo 19 kilómetros de Bariloche, es el más grande de Sudamérica, con 1200 hectáreas esquiables y vistas increíbles de la cordillera de los Andes y los lagos Nahuel Huapi y Gutiérrez.

Sus casi 30 medios de elevación, un play park para quienes se están iniciando, más de 60 pistas y sectores privilegiados entre bosques, cañadones y espacios con abundante nieve polvo para la práctica de fuera de pista hacen de este centro de esquí el lugar ideal para que cada uno disfrute del deporte como más le guste.

Cerro Castor, en Tierra del Fuego

A treinta minutos de Ushuaia, se despliega el centro invernal más austral del mundo. Ya sea snowboard, esquí alpino o esquí de fondo —una actividad muy popular del invierno fueguino, a tal punto que Ushuaia fue declarada Capital Nacional del Esquí de Fondo—, hay diversidad de pistas y actividades. El complejo posee 12 medios de elevación y 34 pistas con diferentes niveles de dificultad, incluyendo una pista negra llamada “Cóndor”, ubicada a 2500 metros de altura.

Con la temporada más extensa de Sudamérica, este centro también ofrece la posibilidad de realizar caminatas con raquetas, patinaje sobre hielo, paseos en trineo o motos de nieve para conocer el bosque y el valle de otra forma.

Cerro Bayo, en Villa La Angostura

A lo largo de un hermoso camino panorámico de 5 kilómetros frente al lago Nahuel Huapi, muy cerca de Villa La Angostura, es el primer centro de esquí de Latinoamérica con Certificado de Gestión Ambiental.

Con un concepto boutique, sus 24 pistas tienen distintos niveles de dificultad y además ofrece cuatro itinerarios fuera de pista. También hay parques de nieve con dos zonas diferentes para la práctica de freestyle y clases de esquí adaptado. Son ideales las opciones de snow tubing, para disfrutar en familia de la adrenalina de la nieve, y los circuitos de caminatas con raquetas (en compañía de un guía), que incluyen paradas en puntos panorámicos y degustación de chocolate.

Cerro La Hoya, en Esquel

A sólo 12 kilómetros de Esquel, se encuentra este histórico centro de esquí para todo público, con ascensos y actividades también para no esquiadores. Es la segunda estación de esquí más antigua de Argentina y un lugar ideal para aprender a esquiar, ya que su pista de principiantes es amplia, segura y tiene todos los servicios.

Para quienes tienen experiencia, hay doce pistas intermedias y cinco difíciles. Para los más avanzados, cañadones para el fuera de pista con excelente calidad de nieve, que se mantiene seca durante más tiempo gracias a la orientación de la montaña.

Cerro Perito Moreno, en El Bolsón

A 25 kilómetros al norte de El Bolsón, invita a practicar esquí alpino, nórdico y snowboard mientras se disfruta de los bosques nevados en sus 24 kilómetros esquiables, distribuidos en 16 pistas. Además, se pueden hacer caminatas con raquetas y esquí de travesía, juegos de nieve y paseos en trineo.

El cerro cuenta con un área de gastronomía de montaña y un refugio del Club Andino local, con habitaciones para albergar hasta 60 personas.

Valle de las Leñas, en Mendoza

En plena cordillera de los Andes y a 80 kilómetros de Malargüe, se encuentra este centro de esquí de alta montaña que cuenta con 30 pistas y 14 medios de elevación, una escuela de esquí, snowboard fuera de pista y esquí adaptado. Para quienes viajen en familia, hay un parque de aventura para disfrutar la nieve con juegos y trineos.

También es el lugar para vivir una experiencia totalmente distinta: es el único lugar de Sudamérica que cuenta con esquí nocturno.